top of page

Proyecto #4 | Un vistazo al mundo de Sabrina Spellman, cómics vs serie

  • Foto del escritor: Los libros de Carmencita
    Los libros de Carmencita
  • 28 oct 2022
  • 4 Min. de lectura

Bienvenidos de nuevo al blog, el día de hoy les traigo el proyecto del mes de octubre. No sé si han notado pero he tratado de hacer una publicación especial cada mes y pues en esta ocasión el proyecto se titula: “Un vistazo al mundo de Sabrina Spellman, cómics vs serie”.


El título de este proyecto es bien claro, luego de haber leído los 7 primeros tomos de los cómics de Sabrina y haber visto la primera temporada de la serie en Netflix, en esta publicación vengo con una comparación entre ambos. Voy a tocar temas muy específicos, de otros puntos hablaré de manera muy general y ya luego haré mi recomendación final/conclusión.

Uno pensaría que la serie y los cómics por lo menos coincidirían en la personaje que hace de protagonista, Sabrina Spellman. Sin embargo, desde este punto de partida ya notamos diferencias. Por un lado, tenemos la perspectiva de la serie. En esta, Sabrina es enfocada como el claro punto central de la trama. Desde los primeros capítulos vemos cómo se marca a Sabrina con su aspecto físico, con ropa de tono rojo brillante mientras que el resto del elenco lleva prendas de tonalidades oscuras. Aparte, está el íconico cabello de Sabrina que es otro elemento visual que la diferencia del resto.


Sin embargo, no todo lo que la hace única es bueno. A la serie se le va la mano ya que, así como su ropa es especial, también lo son sus decisiones. Llega un punto en la serie en el que irrita ver cómo Sabrina no tiene que lidiar con consecuencias reales, ya que siempre se sale con la suya de una manera u otra.


Y es precisamente eso lo que me molesta, Sabrina es motivada por su incapacidad de decidirse entre un mundo u otro. En pocas palabras, quiere lo mejor de los dos lados pero no está dispuesta a sacrificar absolutamente nada. Me dan ganas de preguntarle si está conciente de que una sociedad tiene reglas, lo digo porque quiere mantener su vida con sus amigos mortales pero luego no quiere renunciar a sus poderes.




Por el otro lado, tenemos el cómic que alivia esta frustración. En este, no se siente ridículamente obvio que Sabrina es la protagonista. Es decir, se sabe pero no es que te lo recuerden cada tres segundos. De hecho, hay un par de tomos en los que ella casi ni sale, lo cual fue muy refrescante luego de la experiencia de la serie. Es casi como si nos enfocaramos bastante en el mundo y el lore de las brujas para entender qué papel juega Sabrina en todo eso.

Y ahora que ya hablamos de Sabrina, pasemos a su motivación, Harvey Kinkle. Es muy claro que la serie y los cómics tienen perspectivas muy diferentes sobre qué representa él para Sabrina. Mientras que en la serie tenemos a otro protagonista que toma sus propias decisiones y tiene sus propias motivaciones, en los cómics casi que podría ser otro árbol en el fondo de la escena.


Uno de los mayores problemas de la serie en cuanto a Harvey es que a pesar que le dan vida propia, se quedan cortos y nos dan a un personaje muy blando. En muchas ocasiones se siente como si Kinkle no estuviese más que para ser aquello que mueve a Sabrina.


También está el hecho de que la serie parece estar obsesionada con ridiculizar a Harvey y pintarlo como el más cobarde del grupo. No sé por qué se le dedica tanto tiempo a ese tema pero creánme que son bastantes minutos en eso sin razón aparente.


Sin embargo, tenemos el otro extremo en los cómics ya que desde el incio es una víctima de Sabrina y sufre consecuencias atroces sin hacer nada para merecerlo. Esto debido a que él y Sabrina no están realmente enamorados, sólo los mueve la idea/ilusión de estar enamorados, principalmente a Sabrina.


Y bueno, para entender estas diferencias hay que dejar algo muy claro: llega un punto en el que la trama es bastante distinta entre la serie y los cómics. Es por esto que, hasta cierto grado, Sabrina y Harvey no son reflejados de la misma manera que el show. No estamos hablando de diferencias en detalles pequeños, oh no. Estamos hablando de giros, motivaciones, víctimas, escenas completamente diferentes. Ahora, no sé si para bien o para mal. Ambas tramas son macabras pero mientras la serie se siente muy “jóvenes tratando de salvar al mundo” los cómics tienen un aura de “todos van a morir y nada podrá evitarlo”.

Esto se siente en todos los aspectos de los cómics. Las brujas, por ejemplo, son mucho más tenebrosas en los cómics ya que transmiten esa sensación de que les falta un tornillo y no dudarán en comerse tu carne si te metes en su camino (literalmente se comerían tu carne). Las brujas genuinamente pueden ser peligrosas y no se siente su aspecto humano lo cual ayuda a que todo sea aún más creepy.


Personalmente, disfruté más la versión creepy y cruda de los cómics sobre la serie. Esta última fue muy entretenida pero llegó un punto en el que se perdió el aura tenebrosa y dio paso a típica serie de jóvenes resolviendo misterios/enfrentandose al mundo. Basado en qué estén buscando para este halloween, ahí queda la recomendación final.

Comments


bottom of page